Poesias

Sevillanas de Ntro. Padre Jesús Nazareno de Cáceres.
David Remedios Solís 

Viernes Santo, Madrugada,                                
Llorando va el Nazareno,
Y una pena se le clava
En cada herida del cuerpo.
 
Cáceres rinde su nombre,
Cáceres rinde su nombre
Al Nazareno y maestro.
Cuando pasa a nuestro lado
Parece pararse el tiempo.
 
En el Adarve a su paso
La noche se va muriendo
Y las rodillas se hincan
Al escuchar sus lamentos.
 
Cáceres rinde su nombre,
Cáceres rinde su nombre
Al Nazareno y maestro.
Cuando pasa a nuestro lado
Parece pararse el tiempo.
 
Una saeta se escucha
Que hace trepidar el cielo.
¡Y esas las espinas clavadas
En la frente del Cordero!

Cáceres rinde su nombre,
Cáceres rinde su nombre
Al Nazareno y maestro.
Cuando pasa a nuestro lado
Parece pararse el tiempo.
 
Al quejarte, Padre Nuestro,
Al pueblo encoges el alma,
Y las torres se arrodillan
Por cada gota que sangras.
 
Cáceres rinde su nombre,
Cáceres rinde su nombre
Al Nazareno y maestro.
Cuando pasa a nuestro lado
Parece pararse el tiempo.
 
Y a Santiago ya regresa,
Se cumplió la profecía:
En una cruz morirá
La Luz del eterno día.
 
Cáceres rinde su nombre,
Cáceres rinde su nombre
Al Nazareno y maestro.
Cuando pasa a nuestro lado
Parece pararse el tiempo.